En silencio y sin tanta prensa como en la edición pasada, pero con el mismo o más talento, el subcampeón está entre los cuatro mejores y quiere volver a la final para tener rápida revancha y poder quedarse con la Orejona. Liverpool, que mantuvo la base del equipo que la temporada pasada cayó en la definición frente a Real Madrid, se metió nuevamente en las semifinales de la Champions League al golear como visitante a Porto por 4-1 y sellar su pasaje a la siguiente instancia por un categórico 6-1.

Sin transpirar

En Portugal, los Reds demostraron todo su potencial y rápidamente se pusieron en ventaja por 2-0 gracias a las anotaciones de Sadio Mane y de Mohamed Salah. Sin embargo, unos minutos de zozobra vivió cuando Eder Militao descontó promediando el complemento.

Pero, con la gran chapa de candidato, liquidó la eliminatoria por intermedio de Roberto Firmino y de Virgil van Dijk. Así, los de Jürgen Klopp avanzaron de ronda, donde se verán las caras con el Barcelona de Lionel Messi.