
Una joven instagramer que estaba vacacionando en las Bahamas quiso sacarse fotos junto a tiburones y terminó siendo víctima de un brutal ataque.
Katarina Zarutskie de 19 años fue al Caribe de vacaciones con su novio y quiso realizar una sesión de fotos durante una actividad que incluía nadar con tiburones.

La joven logró sacarse unas fotos junto a los animales pero terminó siendo atacada por uno de los tiburones que le mordió el brazo y la arrastró bajo el agua.
"Tenía mi muñeca en la boca y podía sentir sus dientes hundirse en mi brazo", manifestó la víctima, que logró liberarse del animal y nadó con el brazo ensangrentado fuera del agua para no tentar a más tiburones.

La afectada fue trasladada a una clínica y luego viajó a Florida para recibir un tratamiento adicional por el alto riesgo de infección que implica este tipo de ataques. "Soy muy afortunada de seguir teniendo mi brazo", manifestó la chica.


